[#AbolishICE] Montajes del FBI al servicio del negocio de las cárceles privadas

El movimiento contra la represión a los migrantes por el gobierno EEUU #AbolishICE avanza en la denuncia de los intereses privados que se beneficían de esta situación. Pero las instituciones del Estado también maniobran contra este movimiento, en sentido amplio, e intentan aislarlo de la población.
El medio Shadowproof se ha hecho eco del "piquete móvil" que a finales de agosto denunció en el centro de Manhattan la implicación de sectores financieros con el departamento de migraciones -ICE- a través de las compañías que se benefician de las cárceles privadas, como CoreCivic y GEO Group. El piquete fue coordinado por la red de activistas Metropolitan Anarchist Coordinating Council - MACC: "Hay que acabar con los abusos generalizados contra los derechos humanos perpetrados por el ICE y las cárceles privadas", declaró el portavoz Ali Jafferi. Shadowproof amplía el contexto de la acción:
ICE opera con al menos 130 centros de detención en los Estados Unidos. Si bien la agencia afirma que solo el 18 por ciento de sus prisioneros adultos están recluidos en instalaciones propiedad de empresas privadas, esa cifra oculta la realidad. El sesenta y seis por ciento de los detenidos adultos se encuentran en prisiones bajo los llamados "acuerdos de servicio intergubernamental", o contratos entre ICE e instituciones públicas locales. Las instalaciones pueden ser privadas, pero debido a que ICE no está contratando su uso directamente de una compañía carcelaria con ánimo de lucro, la agencia no lo cuenta como tal.
Migration Policy Institute, una organización de investigación para la defensa de las personas migrantes, estima que el 62 por ciento de los detenidos por ICE están recluidos en instalaciones privadas. El Instituto también identifica a CoreCivic y GEO Group como los mayores operadores de estas cárceles con fines de lucro. Mediante un mayor escrutinio de CoreCivic y GEO Group, los activistas han identificado a las compañías financiadoras como el eslabón más débil de esta cadena.
Un informe de In the Public Interest, que investiga la propiedad público-privada, enumeró a HSBC entre los principales acreedores del Grupo GEO, suscribiendo casi 33 millones de dólares en bonos para la compañía privada de prisiones. Los detalles de las acciones revelaron que Vanguard, BlackRock y Prudential son algunos de los mayores accionistas de CoreCivic y GEO Group, con un valor combinado de más de mil millones de dólares.
Estos fondos fueron elegidos como objetivo por los activistas, a pesar de que los portavoces de las compañías hayan respondido, cuando lo han hecho, con evasivas sobre la diferencia entre lo político y lo financiero. La manifestación fue recorriendo las sedes de cada compañía entre canticos en el exterior o, a veces, en el interior de las mismas.
"Mientras marchábamos recibimos algunos aplausos y hubo quien se unió a nuestros cantos", ha relatado Jaffery. "Entramos en el recibidor de cada edificio y leímos una declaración escrita exigiendo que estas compañías se desvinculen de ICE y luego leímos una lista de los nombres de los migrantes que murieron bajo custodia de ICE este año".
En los días posteriores a la manifestación, alguna de las financieras, como HSBC, ha negado que las denuncias hayan tenido impacto en sus negocios, pero los activistas ya han visto alguna prueba de lo contrario. "Un pequeño equipo fue a varias sucursales de HSBC en Manhattan para repartir octavillas y los trabajadores de estas sucursales informaron que HSBC hizo que su personal asistiera a reuniones sobre la campaña anarquista contra los especuladores de ICE", según Jaffery. "Claramente, nos están prestando atención". Una acción similar en julio ha llevado recientemente a que PNC desinvierta en las cárceles con ánimo de lucro, y el mismo HSBC está empezando a hablar -de un modo que no puede ser casual- de desinvertir. Esto ha llevado al MACC a anunciar próximas acciones similares, y a animar a otros a que las acometan.
Ante la actividad incisiva del movimiento, las agencias represivas del Estado están tomando cartas según estrategías que llevan años aplicando. Hunter Walker, periodista de YahooNews, ha sacado a la luz la "nota de inteligencia externa" que la oficina del FBI de Phoenix ha dirigido a las agencias policiales de todo el país, basada en una colección de publicaciones aleatorias en perfiles de redes sociales, artículos en línea, así como en el testimonio de un informante: con estos ingredientes, establece que quienes se organizan contra la detención en masa y las políticas racistas de inmigración de los Estados Unidos, impulsando el movimiento #AbolishICE, representan un peligro de violencia cada vez mayor. Walker señala que lo que el FBI describe como peligro de violencia se puede caracterizar mejor como organización de base, con lo que se desmiente la idea de que "el FBI persigue actos criminales y no ideologías".
Todo lo que el informe presenta como pruebas se refiere a actividades de protesta no violenta. La información recopilada y citada en el documento del FBI, fechada el 30 de mayo de 2019, preocupan a los activistas y defensores de los derechos civiles, porque el gobierno está clasificando derechos de oposición garantizados por ley como extremismo violento o terrorismo doméstico. El portal anarquista It's Going Down ha dedicado un amplio comentario a esta revelación.
La nota de inteligencia del FBI describió la actividad de protesta en la frontera como proveniente de "extremistas anarquistas". Aunque especificó que el análisis fue escrito por la oficina de Phoenix del FBI y no refleja necesariamente la perspectiva nacional de la entidad, la nota muestra que, al menos en Arizona, la oficina hace seguimiento de los grupos que protestan en la frontera y los etiqueta como "violentos en potencia".
Según Yahoo News, las "pruebas" citadas en el informe del FBI son meramente una colección de citas espigadas de dos artículos de It's Going Down (una revista en PDF que presenta un breve resumen de la actividad anti-ICE en Arizona y un amplio análisis y propuesta para la resistencia anti-ICE), citas de publicaciones en redes sociales de un activista antifascista expulsado varias veces de Arizona, y un taller de defensa personal organizado en el Infoshop Táala Hooghan de la localidad de Flagstaff. También cita campañas de recaudación de fondos de la organización de autodefensa comunitaria de izquierda Redneck Revolt para adquirir armas con las que contribuir a la seguridad de actos de protesta. Estas son las piltrafas de información con las que el FBI ha cocinado su advertencia; como declara a Yahoo News un ex-agente del Servicio de Seguridad Nacional, "¿Para qué levantar esta liebre sin pruebas fiables y con fuentes no confirmadas?".
Uno de los pilares del documento es la descripción de la página de Facebook del Frente de Liberación de la Frontera - Border Liberation Front, al que vincula a planes para interrumpir las operaciones de seguridad fronteriza de EEUU y la construcción de un muro a lo largo de la frontera con México. Las actividades del grupo, de hecho, se identificaron como "determinantes" para la conclusión del FBI de que los grupos extremistas de protesta fronteriza "se armaban cada vez más y usaban la fuerza letal". Un activista del Frente entrevistado por Yahoo News no se sorprende de ello, debido a que ya fueron incluidos en "bases de datos de activistas, periodistas y animadores de redes sociales vinculados a las caravanas de migrantes" con, en algunos casos, pasaporte controlado, y que se difundió coincidiendo con el despliegue de tropas de Trump en la frontera, en el periodo electoral de mediados de 2018. Fueron días de difusión de teorías de la conspiración desde el gobierno, incluyendo vinculaciones de las caravanas con el ISIS o la Mara Salvatrucha.
Después de ser incluidos en esta lista, muchos periodistas, activistas y voluntarios humanitarios informaron sobre el acoso del Estado: reiteradas retenciones en controles de tráfico para preguntar sobre lo fotografiado en lugares como Tijuana, una detención de trece horas en Méjico seguida de expulsión del país. Siete periodistas de EEUU han sido sometidos a este trato entre cuarenta y ocho activistas de distintas nacionalidades, algunos de organizaciones como Borders Angels y Pueblo Sin Fronteras.
The Intercept señala que esta inquisición generalizada sobre periodistas y activistas se produce en consorcio entre los gobiernos de EEUU y México. Aunque muchos vean una pantalla de humo en las declaraciones del presidente, medios como Fox difunden señales de alarma sobre los migrantes que están en sintonia con las políticas gubernamentales sobre el terreno. Mientras, la Policía Federal de México acosa a periodistas como colaboradores en el cruce ilegal de fronteras o incluso en actos violentos contra la policía, en un contexto en el que el Departamento de Seguridad Nacional de EEUU infiltra la caravana con informantes y monitoriza grupos de Whatsapp -según informó en noviembre de 2018 NBC News-.
Las fuerzas del orden público tanto en México como en los EE. UU. combinan la vigilancia con descripciones de los activistas solidarios como "violentos", en los momento en que Trump expresaba temores sobre la propia caravana de migrantes. It's Going Down ha informado de que los casos de la llamada "violencia" de los migrantes señalados por los oficiales de Aduanas y Patrulla Fronteriza, fueron simplemente producto de la violenta intercepción de las personas que intentaban cruzar la frontera.
El informe del FBI se hace incluso eco de delirantes teorías conspiratorias de la extrema derecha, al afirmar que el Frente de Liberación de la Frontera negocia con cárteles de la droga mexicanos para conseguir armas -mientras una activista del Frente declara a Yahoo News que sólo recaudan fondos para hacer llegar alimento y ropas a quienes buscan asilo-. Son teorías amplificadas por medios como Fox News, The Daily Wire, and The Daily Caller, que se hacen eco de un informe desclasificado del FBI citado por The San Diego Tribune. El informe en cuestión, no publicado para no "delatar a un informante", resulta totalmente conjetural y ha sido contestado en los medios locales por ir en la línea de propaganda de extrema derecha según la cual una movilización anti-ICE en El Paso sería un campo de entrenamiento antifascista. It's Going Down precisa lo evidente:
Como muchos han señalado, los cárteles no tienen ningún interés en la política revolucionaria, y actualmente ganan mucho dinero con la muerte y el sufrimiento que ocurren en la frontera. Además, los carteles y los grupos del crimen organizado también se oponen a movimientos autónomos anticapitalistas y anticoloniales en México, como los zapatistas y el Congreso Nacional Indígena, y varias comunidades se han organizado para expulsarlos de sus ciudades. El único escenario en el que los carteles sintonizan con las luchas liberadoras está en las mentes de los teóricos de la conspiración racista de extrema derecha como Alex Jones.
Lo irónico de que el FBI difunda mensajes sobre el peligro de rearme de movimientos de izquierda es que el suroeste de EEUU y Arizona en particular, dejando al margen las atrocidades continuas del Estado en la frontera, es un foco de actividad de las milicias de extrema derecha y por la supremacía blanca. Esto incluye:
- Milicias de extrema derecha que participan en operaciones paramilitares en la frontera. Estos grupos han estado vinculados durante mucho tiempo a grupos nacionalistas y neonazis blancos. J.T. Ready, anteriormente un miembro de bajo nivel del Partido Republicano local, se destacó como miembro del Movimiento Nacional Socialista y dirigió patrullas armadas en Arizona en la frontera, antes de matar a toda su familia y luego suicidarse. Después de su muerte, se reveló que Ready estaba fuertemente bajo vigilancia del FBI y algunos han supuesto que podría haber sido un informante.
- Las milicias de extrema derecha en los estados cercanos, como los Patriotas Constitucionales Unidos, acapararon los titulares después de que se forzasen a migrantes a grabarse junto a ellos en el desierto. Poco después, su líder Larry Mitchell Hopkins fue arrestado por el FBI por tenencia de armas. Otras milicias de extrema derecha como los Three Percenters, que desde su sede en Arizona cruzan estados para atacar en la frontera con armas de alta potencia, y han sido vinculados a ataques armados contra migrantes.
- Miembros del Movimiento Patriota AZ (PMAZ), una coalición de extrema derecha de activistas patriotas, nativistas y nacionalistas blancos -incluido Antonio Foreman, un neonazi que participó en la manifestación Unite the Right en Charlottesville-, han sido vinculados a numerosos actos de intimidación racista, como destrozar una mezquita y hostigar a los migrantes. Hay una grabación de vídeo en la que miembros del grupo recorren la frontera junto a oficiales de aduana.
- Numerosos actos de extrema derecha, asesinatos por nacionalistas blancos y neonazis, graffiti racista, amenazas violentas y vandalismo, todos dirigidos al público en general.
Hay también que recordar los lazos estrechos entre el núcleo local del Partido Republicano, figuras como el sheriff Joe Arpaio y la política de extrema derecha, con muchos grupos nacionalistas y milicianos blancos que apoyan políticas racistas anti-inmigrantes (como SB-1070) y las normas impulsadas por la policía local, una policía que publica con frecuencia contenido racista en las redes sociales - la investigadora Emily Baker-White identificó a setenta y cinco oficiales de la policía de Phoenix responsables de publicaciones sesgadas racialmente, misóginas, islamofóbicas o que alientan la agresividad policial-.
It's Going Down resume la coyuntura: "A diferencia del movimiento social de base que busca expandir el alcance de la libertad y la autonomía humana, la extrema derecha en Arizona y sus alrededores se ha movilizado para atacarla, a veces violentamente".
Este fin de semana vimos cómo miles de residentes de Boston convergieron contra un minoritario mitin de extrema derecha organizado por nacionalistas blancos y neonazis bajo el lema de "Orgullo hetero". Como en todas estas manifestaciones, la policía centró su atención en la vigilancia contra la multitud antifascista y antiracista, arrestando a alrededor de 35 personas, incluido un periodista. En los días siguientes, ante las crecientes protestas por la brutalidad policial, el juez se negó a retirar los cargos, mientras que un editorial del Boston Herald pedía que los antifascistas fueran etiquetados como terroristas locales.
La gente a menudo se pregunta por qué la policía se comporta de esa manera o por qué eventos como Charlottesville terminan en derramamiento de sangre, pero pasan por alto el hecho de que entonces, al igual que ahora, la información que traslada la policía local sobre estos eventos repite siempre el mismo cantar: "El peligro proviene de los extremistas anarquistas". Si el gobierno comunica a la policía que los grupos de base usarán fuerza letal contra ella, citando información dudosa y no verificada, a menudo de la extrema derecha, ¿se puede dudar de la dirección en que apuntará sus armas?
Por supuesto, no nos engañamos: el imperio de la ley surge del genocidio indígena, las persecución de esclavos y la represión de disturbios, huelgas y levantamientos. En pocas palabras, está haciendo lo que está diseñado para hacer. Si quieres crear un mundo nuevo, espera que el viejo intente detenerte. Pero cuando, a la luz de reportajes de investigación en profundidad, surge la pregunta de por qué crece la extrema derecha, la respuesta es clara: porque sus esfuerzos se centran en luchar contra las luchas emancipadoras impulsadas por colectivos de base.
El ex agente del FBI Mike German subraya que el FBI ha agrupado a los "extremistas negros" junto a los nacionalistas blancos y a los anarquistas junto a las milicias de extrema derecha. La clave es ocultar el hecho de que la aplicación de la ley se ocupa principalmente de los movimientos sociales de base desde abajo, no de la creciente violencia de extrema derecha dirigida al público en general. Documentos del FBI recientemente filtrados, que clasifican a los movimientos sociales como amenazas más graves que los nacionalistas blancos o incluso que los grupos yihadistas, dejan nítido este punto.
Además de esto, los poderosos cabilderos de la industria de las industrias de combustibles fósiles y agrícolas también han presionado con éxito al Estado para que promulgue leyes más duras contra los activistas ambientales y de liberación animal, mientras que eventos como Standing Rock resaltan el grado en que la aplicación de la ley se está fusionando de muchas maneras con empresas de seguridad privada como TigerSwan.
Ya hemos visto que los grupos de presión industriales pueden conseguir que el Estado promulgue leyes contra los activistas, o que los agentes de la ley se coordinan con empresas de seguridad privada. Ya hemos visto a la administración Trump esquivar informes oficiales sobre la amenaza de las organizaciones que se alinean con sus políticas. Es en este contexto en el que el FBI se inventa la amenaza de violencia contra la población proveniente del movimiento #AbolishICE: cuando la estadística de migrantes recluidos por el ICE y el número de menores que denuncian haber sido agredidos sexualmente bajo custodia, violencia real y real, se dispara. Se produce en un momento en que Trump intenta implementar la detención indefinida e incluso anular artículos de la Constitución que garantizan la ciudadanía por derecho de nacimiento. Esto no es casualidad, sino intención.
En un reciente comunicado, los voluntarios del Táala Hooghan Infoshop afirman: "Este país fue construido sobre la violencia contra los pueblos negros, marrones e indígenas, y debemos defendernos de la violencia de la supremacía blanca para sobrevivir.
No es sorprendente que el FBI esté contra quienes enfrentamos las amenazas diarias de la violencia supremacista blanca. Los ataques de COINTELPRO contra el Partido Pantera Negra y el Movimiento Indígena Americano son ejemplos históricos muy recientes de los niveles a los que llega el Estado para vigilar y criminalizar la disidencia. Los cimientos de Estados Unidos son, todavía, la supremacía blanca y el genocidio. Es un hecho el que los supremacistas blancos son responsables de más ataques mortales en los llamados Estados Unidos desde 2001 que cualquier otra amenaza. Según Yahoo News, "los supremacistas blancos fueron responsables de todos los incidentes de terrorismo basados en la raza en 2018", mientras que los antifascistas, o aquellos que resisten el nacionalismo autoritario, no fueron responsables de ninguno.
Cuando la policía militarizada dispara impunemente a las personas negras y marrones y la extrema derecha aparece armada en la frontera, eso se da por normal y se consiente, pero cuando las personas de color se arman para la defensa propia y comunitaria, somos criminalizados y reprimidos".
Nadie se puede sorprender en EEUU de que el FBI se inmiscuya en los movimientos que buscan que las personas pobres y las clases trabajadoras mejoren su situación desarrollando sus capacidades. Así ha sido durante años y así ha sido recientemente. Aunque ellos nieguen que hay una "ideología policial", los hechos la demuestran. La simbiosis entre la extrema derecha y el FBI en un momento crítico para el país indica que la historia se repite.
Ante el peligro de que leyes promovidas por partidos de uno y otro signo contra la violencia fascista puedan acabar designando a los movimientos de base como terroristas, necesitamos ser claros en nuestra oposición a las falsas soluciones ofrecidas por el Estado y aumentar nuestra capacidad para enfrentarnos a lo que lleva la miseria a nuestras vidas.

- Inicie sesión o regístrese para comentar
Imprimir- 2232 lecturas
Enviar a un amigo












![Portal Anarquista norteamericano [inglés]](http://www.alasbarricadas.org/common/img/banners/infoshop.png)
![Portal Anarco-Comunista [internacional]](http://www.alasbarricadas.org/common/img/banners/anarknet.png)
![Portal Anarquista [inglés]](http://www.alasbarricadas.org/common/img/banners/libcom.png)
![Noticias para anarquistas [inglés]](http://www.alasbarricadas.org/common/img/banners/anarchorg.png)

![Cruz Negra Anarquista [Péninsula e Islas]](http://www.alasbarricadas.org/common/img/banners/cna.png)






