Lluvia de imágenes sobre Movistar: hasta el Correscales y más allá

Para ver de dónde sale esto de "Correscales" hay que ir al año 2015 de la era cristiana: todas las redes de telecomunicaciones de Spain se encuentran oprimidas por el peso de un obeso parásito en su centro, el conglomerado Telefónica-Movistar.

Imagen

¿Todas? No. Unos puntitos azules empiezan a hacer cosquillas al gigante; hablan en las calles y en las redes de una huelga de los instaladores de Movistar...

Imagen

Con un movimiento de guerrilla de la comunicación, la huelga de instaladores de Telefónica Movistar se anunció y se dio difusión mediante uno de los mejores despliegues visuales que han surgido de movimientos sociales en los últimos años. No parece casualidad que una movilización tan importante haya venido acompañada de imágenes tan interesantes.

Imagen

La historia de Telefónica es un caso para el estudio: su posición dominante en el mercado de las telecomunicaciones muestra la enorme distancia que hay del dicho neoliberal de libertad-de-comercio-libertad-del-consumidor al hecho de que los servicios tienen unas condiciones técnicas en los que la rentabilidad pública difiere de la privada - la entrada de empresas privadas para aprovecharse del panal de rica miel sólo es posible mediante guerras de saqueo por una infraestructura de fondo que ciudadanos y trabajadores han abonado durante años.

En cualquier caso, Telefónica se ha convertido en una compañía hiperrentable a base de pasilleo político, de chantaje publicitario, de manipular y exprimir las necesidades comunicativas y culturales de todas y todos en un escenario de desrregulación y crisis, y a base de explotar a sus trabajadores mediante un uso salvaje de subcontratas -una política en la que aún hoy se sigue insistiendo-.

Imagen

Imagen

Imagen

Por algún sitio hay que empezar, y la convocatoria de huelga indefinida de los trabajadores de las subcontratas de Telefónica exigiendo acabar con ese sistema ha sido el punto de apoyo que puede empezar a mover este mundo.

Imagen

Una huelga que recuerda quién es imprescindible aquí, no precisamente la trama de parásitos que se enriquece a costa de quien trabaja, sino quien trabaja. Con ella se ha iniciado un camino que será largo, tanto más dada la contundencia con que la empresa está embistiendo para marcar su territorio -y a pesar de que algunas sentencias han anulado alguna de sus maniobras.

Imagen

Imagen

Ahí tenemos que estar todas y todos porque para eso -entre otras cosas- estamos, para irritar a las empresas.

Imagen

Imagen

En este artículo están reunidas algunas de las imágenes con que los huelguistas inundaron internet y lo que no es internet para dar a conocer su situación. Un trabajo que, aunque recién empezado, está a la altura de la política visual de los tiempos del Partido Pantera Negra o de la Insumisión.

Imagen

Hay que tener en cuenta que los materiales visuales que genera un movimiento no son un instrumento suyo, sino parte misma del movimiento, de la lluvia que lo hace crecer.

Imagen

Existiendo, las imágenes llenan el vacio del que se nutren la desesperación y la burocracia; al topar con ellas, la sociedad se da un coscorrón que la despierta y la devuelve a la realidad. Imágenes chulas, movimiento potente.

Imagen

En este casos, la difusión de las imágenes por las redes las hace más informativas que nunca: en vez de servir para ocultar en qué mundo vivimos difundiendo mensajes alienantes, sirven para recordar quién las hace posible, quién las tiende y las cuida; si alucinamos con redes que nos hacen superar los límites de nuestra casa, es gracias a que hay trabajadores que las pueden instalar en nuestra casa. No son magia de la ciencia -y la empresa-, sino ciencia -y trabajo- de la magia.

Imagen

Imagen

El nuevo paso que va a dar la huelga -con el paraguas de la asociación La Marea Azul- es el Correscales (19, 20 y 21 febrero), y no por casualidad es un movimiento de hacer ver.

Imagen

Frente al habitual desfile de la victoria que Telefónica viene organizando en los últimos años en Barcelona, el Mobile World Congress, esa horda de consumo alienado que pretende convencer de que la Barcelona del cambio no tiene otra opción que arrodillarse a recoger el maná del turismo -y a la que ya se enfrentó la marea azul-, el Correscales va a ser una gran movilización que unirá Bilbao -donde la huelga consiguió un buen acuerdo- con Barcelona. En este momento se está pasando la gorra para hacerla posible: de ahí se pagarán gastos pendientes de la anterior huelga y también se sufragará la nueva movilización y se creará una nueva caja de resistencia, así como se financiará una película que servirá como testimonio del proceso. 

Imagen

Caja de resistencia contra la precariedad, a la calle: ¡apoya el Correscales!. - Si quieres, puedes aportar a un kilómetro de difusión y apoyo mutuo en: goteo.org/project/correscales-2016

Imagen

Imagen

Enlaces relacionados / Fuente: 
http://teleafonica.blogspot.com.es/
Aviso Legal  |  Política de Privacidad  |  Contacto  |  Licencias de Programas  |  Ayuda  |  Soporte Económico  |  Nodo50.org