Enviado por manu en Lun, 24/10/2011 - 13:55
La reciente aprobación del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia y Estados Unidos reafirma la política militarista del gobierno de Barack Obama hacia América Latina, como el principal camino para resolver la crisis económica y el declive de la hegemonía global y regional. Ironías de la vida, el TLC impulsado por el conservador George W. Bush fue destrabado luego de cinco años por el Congreso, bajo el progresista Obama, mostrando que cuando se trata de los intereses imperiales y multinacionales no hay diferencias sustanciales entre los dos partidos estadunidenses.
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