El Estalinismo y el mundillo del Símbolo, lo Sagrado, el Sacrificio y la Víctima

El comportamiento de los estalinistas puede ser rastreado en una serie de comportamientos (propios de los seres humanos) llevados a extremos insoportables. Para comprender esa sociología del terror que convierte en papanatas peligrosos a universitarios, a pescaderos y a hinchas de fútbol, no podemos quedarnos en la apariencia. Que describamos bien una ejecución, no implica que la hayamos explicado.

Resumiendo: un estalinista es un personaje con una Misión Histórica (1) afiliado a un partido leninista. Ese partido, llamado a salvar a la Humanidad, que se ve rodeado de peligros, necesita forjar su Unidad (2) en torno a una serie de símbolos. Los Símbolos han de ser aprendidos por los militantes mediante una pedazo de comedura de coco. Con el coco comido el militante ve el Símbolo. Luego, piensa, comprende y acepta para ser parte del grupo. Si tú miras un cuadro de Stalin, ves solo a un militar con bigote. Si lo ve un estalinista, siente que se le abre el culo.

Sabemos que el origen de las clases sociales comienza con la aparición de sacerdotes, que son los encargados de crear un tótem y de establecer el ritual que lleve a cabo el sacrificio mediante el cual se une el grupo ante la calamidad. En una tribu el tótem podía ser un antepasado, un animal…, y el sacrificio pues una bruja, una valiosa cabra… Cuando el ritual se llevaba a cabo con éxito, el grupo se sentía más fuerte, más unido... Y más aliviado cada cual por haber salvado el pellejo.

En el partido estalinista el tótem más sagrado es Stalin. Los símbolos Sagrados se encuentran en la Misión Histórica, en el Partido, en el Comunismo… Periódicamente los encargados de llevar a cabo el ritual (los secretarios y comisarios) efectúan la depuración mediante Congresos. Tras los cuales los militantes suspiran de alivio al ver que a ellos no les tocó. Inmediatamente han de buscar nuevas víctimas, para evitar en el Futuro ser ellos sacrificados. La víctima se busca en quien critica (3) e impide avanzar (4).

Claro, si tú entras en el Politburó en el momento en que el Comisario Político se está cargando a Cogorzovich con el alambre estrangulador (ante la impávida mirada de los camaradas), pensarás: “qué horroroso horror”. Pero si lo contemplas desde un punto de vista simbólico, verás al Comisario oficiando el rito del Centralismo Democrático (5) que mediante el Sacrificio cohesiona al grupo iluminado en torno a lo Sagrado para salvar al inexistente mundo del Futuro (6). Toma ya.

El problema de los estalinistas, es que se les pasa la rosca tanto, alucinan de una manera tan absurda, que son capaces de acabar con el grupo para cohesionar al grupo.

En la nada, la verdad. Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno.

NOTAS

(1) El Destino Histórico: http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11910
(2) La Unidad: http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11831
(3) La Crítica http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11874
(4) Avanzar http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11853
(5) El Centralismo Democrático: http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11953
(6) El Futuro: http://www.alasbarricadas.org/noticias/?q=node/11973