Mensaje
por josep angel » 30 Nov 2012, 18:46
Primero hay que entender que la base de creación de las CUP no son solo jóvenes sino históricos miembros de la izquierda independentista radical de los años 80, algunos de ellos militantes de aquel MDT y de algunos de Terra Lliure, cosa que se puede decir porqué son conocidos y ya han estado años en la cárcel por ello. Esto sumado con los jóvenes que han ido heredando los puestos de los grupos derivados del MDT de los 80. Por lo tanto el origen de la CUP es inequívocamente, a parte de anticapitalista con una base inicial marxista autogestionaria, independentista radical desde siempre.
Pero en los últimos años, la radicalidad de las CUP en cuanto a su modelo se sociedad autogestionaria y su fuerte presencia en acciones en los barrios, pueblos, sindicatos, diversos movimientos sociales, etc, han hecho que existiera una coincidencia de objetivos con otros grupos autogestionarios como algunos libertarios, alternativos u otros marxistas antiautoritarios, que iban por su cuenta y ha habido una unidad de acción social.
Por tanto la pregunta de porqué las CUP quieren tener presencia en el parlamento catalán no hay que hacerla a la idea de las CUP en si, sino a los otros colectivos que no eran originarios de la izquierda independentista que se han unido a este proyecto, ya que la idea original municipalista de las CUP también contemplaba presentarse a les elecciones al parlamento catalán y si no lo han hecho antes es porqué pensaron que aun no era el momento para presentarse con garantías y en estas elecciones si lo han creído.
Cada uno es libre de declararse libertario puro por lo tanto rechazar toda candidatura política por si misma no por anti-independentismo sino por purismo anarquista, cosa que es lógica y correcta.
Pero también hay otros marxistas, pero también alguno que se define como anarquista, que sin rechazar la presencia en elecciones si rechazan hacerlo en un partido independentista por muy de extrema izquierda autogestionaria que sea, aduciendo que el independentismo es cosa de nacionalistas burgueses anti-internacionalistas y bla, bla, bla, bla, o sea, el mismo lerrouxismo de siempre que puso de moda Don Alejandro en 1906, que no es más que ultraespañolismo disfrazado de obrerismo, cosa que nunca puede ser de izquierdas, sino mas bien cercano al falangismo. Vaya si ir en contra de los sentimientos y voluntad popular de un pueblo histórico de ser soberano es de izquierdas o popular, apaga y vámonos.
Por lo tanto las preguntas sobre la gente que integra las CUP con sus proposiciones independentistas radicales de extrema izquierda, no se deberían centrar en porqué se presentan en unas elecciones sino en porqué mucha gente no originariamente de la izquierda independentista radical se han unido a ellos. Aunque a veces la gente tendría que dedicarse mas a explicar sus ideas y proposiciones desde su lucha en la calle o sindicatos que no romperse la cabeza en porqué alguien es independentista y autogestionario a la vez ya que cada individuo tiene sus propias ideas y sentimientos y contra esto es difícil luchar.
Para hacer una revolución social, hay que saber conectar con la mayoría de las clases populares y trabajadoras, si no se conecta de manera mayoritaria con ellas quizás no es una autentica revolución social, y esto va tanto para las CUP como para los autogestionarios antipolíticos, que para llevar a cabo sus proyectos de modelos de sociedad tanto en un Estado Español o en un país independiente, tendrán que saber conectar con la mayoría de las clases populares, cosa que de momento no hemos conseguido ninguno hoy día y para avanzar hay que preguntarse porqué.
Los de las CUP en este caso, no serán herederos de Seguí, pero los que se definen solo anarcosindicalistas o anarquistas puros ahora, tampoco, ya que Seguí fue uno de los líderes, entre otros, que consiguió que la CNT fuera totalmente mayoritaria en el proletariado catalán en 1920, cosa que hoy nadie ha conseguido ahora porqué nadie consigue conectar de esta manera con la mayoría del proletariado actual en Cataluña. Porqué la mayoría de aquellos trabajadores catalanes de los años 20 eran anarcosindicalistas y la mayoría de los trabajadores actuales en Cataluña no lo son? Esa es la pregunta principal que habría que hacerse, quizás muchos no han sabido conectar con la clase obrera en general para acercarlos a la idea de la sociedad autogestionaria.