chief salamander escribió:No obstante, es muy frecuente verlo como una mera descalificación hacia quienes no bailan al son de los planteamientos nacionalistas/(anarco)independentistas. El mismo mecanismo de que si no estás con la plataforma que lideran los rojos eres un sectario, si no estás con mi nacionalismo estás con el nacionalismo de mi enemigo, si no estás con Losantos eres de la ETA etcétera = si no haces lo que yo diga eres como mínimo cómplice de todo aquello a lo que me opongo. De hecho, lo considero una de las acusaciones-fetiche de los indepes contra los anarquistas en general.
Yo, en página 2 escribió:Como los individuos y colectivos anarquistas con una posición anti-independentista no reconocen que en la práctica, más allá de sus deseos e intenciones, su posición les lleva a adoptar formas españolistas, toman el término "anarco-españolista" como si fuera un calificativo inventado por los "nacionalistas", despechados al no poder convencerles de sus planteamientos. Con esta racionalización se re-afirman en su pensamiento, aparte de incrementar su hostilidad y por lo tanto disminuir su apertura mental a posturas cercanas al anarco-independentismo.
-----------------
Akelarre:
Cuando hablo del ego-centrismo del anti-nacionalismo no hablo en el sentido de un individuo sino de una posición doctrinaria que puede ser asumida por varios individuos. Similar a la expresión "el nacionalismo es un egoísmo de masas".
De hecho, podríamos decir que toda posición sectaria es un acto de ego-centrismo, ya que o se basa en una realidad particular y la generaliza a todas las demás, o se basa en una actitud doctrinaria que dice que tal realidad particular no existe o no tiene importancia porque la doctrina lo dice.
"Por mi experiencia y/o por mis lecturas, he llegado a la conclusión de que mi identidad nacional no existe o no cumple ningún papel en mi autoliberación, por lo tanto esto es verdad para todos los demás."
Esta postura ego-céntrica dificulta la apertura mental a otras realidades donde, por diversas condiciones objetivas y subjetivas, para otros individuos su identidad nacional sí es importante y constituye el eje de sus reivindicaciones colectivas.
De manera que la postura anti-nacionalista no sólo se cierra ante la realidad y resulta en un internacionalismo abstracto, sino que además aporta hostilidad y división, porque descalifica de entrada como nacionalistas a las luchas reivindicativas donde la identidad nacional juega un papel importante*. Esto es todo lo contrario a lo que debería ser el internacionalismo verdadero, que es la
cooperación (o sea, todas las partes conservan su autonomía) en la lucha de los individuos pertenecientes a distintas identidades nacionales (que en la gran mayoría de los casos no son las establecidas por los Estados-nación).
Sobre las identidades, ya hablé en otro tópico:
http://www.alasbarricadas.org/forums/vi ... &start=510
* Salvo cuando se trata de la lucha de comunidades como la mapuche, claro. Estando del otro lado del océano, apoyar a la lucha de los pueblos originarios queda bien libertario y nada divisionista, en cambio pronunciarse a favor de la autodeterminación guanche en Las Canarias sí traería "complicaciones".
-------------
Urkijo:
A mí no me quedan dudas de que no estamos hablando entre enemigos. Pasa que, como dice Aquitania, cada uno está muy convencido a priori de lo que piensa y en este tema nuestras ideas son antagónicas, de ahí el debate más como competencia que como colaboración.