Mensaje
por PUNKHEAD » 26 May 2008, 18:00
Esto no se si es una rectificación o un "una de cal y otra de arena":
UN PUNTO DE VISTA SOBRE EL LIBRO
“ANARQUISME I ALLIBERAMENT NACIONAL”
Ciertamente, es una gran iniciativa por parte del colectivo Negres Tempestes y la Editorial Virus el hecho de reeditar este libro que trae por título “Anarquisme i alliberament nacional”.
Aporta un punto de vista, que si bién no es nuevo, sí que lo podemos considerar útil para el debate y por tanto, útil para crecer desde un punto de vista ideológico.
De toda manera, desde el SP del Comité Regional de la CNT/AIT de Catalunya y Baleares, nos vemos en la obligación de contestar aunque sea de manera menos extensa y detallada algunas opiniones reflejadas en el libro.
Esto viene dado por el hecho que el libro “Anarquisme i alliberament nacional” cita varias veces a la CNT. Todo esto, haciendo una crítica bastante extensa de como es, como funciona y como tendría que ser, según los autores del libro, la CNT. Todo esto desde una óptica, esto sí, del año 1983/85.
O sea que el propósito de este artículo, no es entrar en debate por las opiniones de ideología anarquista que pueden aparecer reflejadas en el libro, que con más o menos acierto desarrollan sus autores y muchos de los cuales firmaría yo mismo a título personal.
La intención de mi razonamiento, va únicamente dirigida a intentar responder/preguntar los asuntos que aparecen relacionados con el anarcosindicalismo y por tanto con la CNT.
Todos estos comentarios que constan en el libro alrededor de la CNT, quedan también un poco confusos dado que la situación de ésta en los años de publicación del libro, no eran precisamente los mejores.
El caso es que para un lector novel dentro de la historia del sindicalismo de aquella época, puede crear bastante confusión el hecho de no detallar demasiado claramente cuando se habla de colectivos afines a una CNT de aquel momento bastante convulsa, que actualmente estaría relacionada con CGT o por contra con CNT/AIT. La otra CNT de los PPCC que mencionan los autores del libro, queda más clarificada, puesto que es un sindicato que queda por encima de los errores de los otros y un poco a merced de las turbulencias creadas por la situación global del anarcosindicalismo del momento.
Creo que siendo una reedición, no habrían estado mal unas notas a pie de página en partes del libro donde, según mi parecer, pueden resultar confusas ciertas explicaciones que en aquel momento quizás eran de más fácil entender por parte de los lectores/as.
Pero pienso, que a pesar de que en la nota introductoria del libro, el col.lectivo Negres Tempestes manifiesta que es un primer paso para comenzar una actualización del contenido del libro y por tanto una actualización del ideario anarcoindependentista en un futuro, en ningún momento manifiesta que el que contiene el libro sobre la CNT sea erróneo o desfasado, o como mínimo ni siquiera lo pone en entredicho; y esto puede inducir a pensar que el colectivo Negres Tempestes continúa opinando, como los autores del libro, cosas como que buena parte de la militancia de la anarcosindical tiene opiniones sobre la sexualidad , la familia, etc. muy conservadoras o que la CNT forma parte de un españolismo rancio del más alto nivel.
Para mí, es una realidad (la que se dibuja en algunas partes del libro sobre la militancia de aquel momento) totalmente ajena a la actual CNT-AIT.
También me cuesta mucho, desde el punto de vista de la actual CNT, entender como se nos puede llamar españolistas, puesto que en ningún momento dentro de nuestra organización se corta las alas a ningún sindicato o individuo por manifestar un punto de vista determinado sobre la libertad de un pueblo.
Es más, en nuestros estatutos queda perfectamente claro que estamos por la libertad de todos los pueblos y esto incluye el nuestro. El catalán.
Un ejemplo claro y que lo he vivido los últimos diez años de primera mano:
Yo soy miembro de la CNT de Olot. Aquí siempre hemos utilizado el catalán dentro de nuestra organización, hemos defendido nuestra lengua materna (el catalán) en más de un ámbito, y os puedo asegurar que nadie, por muy nacionalista que sea, se considera más catalán que nosotros (se da por sobreentendido que no queremos un Estado, sea catalán o español). Y siempre hemos estado cómodos con un modelo organitzativo que nos federa con la CNT del resto del Estado, puesto que en ningún momento hemos notado por parte del resto de la CNT ninguna falta de respeto por las singularidades de nuestro pueblo.
Por cierto, la CNT se creó en Barcelona por trabajadores/as catalanes.
Se dice en el libro, que nuestra organización geográfica (Regionales), tiene una nomenclatura equiparable a las decimonónicas o incluso que el franquismo definía los pueblos de la península como regiones o regionalismos. Pero cualquier “problema” (fueran todos tan pequeños!) de cambio de mapa Confederal, se puede cambiar con los mecanismos de que se ha dotado la propia CNT en sus sucesivos Congresos. Incluso se podría cambiar la nomenclatura, incluso la “N” de las siglas, pero saldríamos del tema que nos ocupa si entramos en este terreno en este artículo y sería demasiado extenso todo ello.
Por otro lado, defiendo que la CNT esté organizada a nivel Estatal por cuestiones prácticas y no de españolismo. La legislación y la mayor parte de lo que hace referencia al mundo del trabajo que afecta a los trabajadores/se de Euskadi, Catalunya, Madrid, etc. es prácticamente el mismo y por tanto, es más coherente unirse con los que están afectados por el mismo problema para tener más fuerza.
También hay que tener en cuenta que todos los sindicatos tienen una gran autonomía. Siempre que respeten los acuerdos congresuales que ellos mismos han aceptado previamente como válidos, pueden optar por la lucha que más les interese y por tanto deja la puerta abierta a reivindicaciones más allá del ámbito estrictamente laboral y en consecuencia más socioculturales.
O sea , que de españolismo nada. Si Catalunya fuera independiente de mano de los políticos de turno, simplemente nos amoldaríamos a la nueva realidad social y por tanto al nuevo ámbito territorial de lucha.
Es más, continuaríamos dentro de la AIT.
Y hablando de nuestra organización internacional. Tampoco en ningún momento se mencionan los acuerdos organitzatvos de la AIT, que por el hecho de utilizar un sistema organitzativo equivalente en todas partes tiene claro que sólo puede haber una organización anarcosindicalista adherida a la AIT por Estado, puesto que se presupone que no hace falta formar varías para luchar por el mismo en un único ámbito socio-político. Agrupe o no varios pueblos. Opino que es una de las carencias que tienen los autores del libro al no mencionar qué pasa con la AIT.
De todas maneras, tal como digo al principio del artículo, aplaudo la iniciativa de Negres Tempestes.
Ciertamente hacen falta más libros de temática anarquista en catalán, que si bién es un ámbito lingüístico reducido en comparación al castellano que puede tener un ámbito más internacional y de más fácil difusión, no creo que tengamos que ahorrar esfuerzos al editar en nuestra lengua, que por otro lado es una tierra donde el anarcosindicalismo y el anarquismo tienen unas raíces muy profundas.
Marcel Surinyach Casals
Secretari General del Comitè Regional
De Catalunya i Balears