Yo creo que estos debates siempre se van mucho por las ramas sobre temas como qué es la cultura, sobre si existen o no los pueblos, sobre si las tradiciones son malas o buenas, y mi intención no es que el tema vaya por ahí, porque son cosas que yo tengo claras y asumidas ya. Si quereis se discute en otro post, pero este le he abierto para intentar buscar afinidades no para convencer a nadie de mis planteamientos.
La cultura desde un punto de vista materialista es el resultado de la adaptación a las relaciones económicas. La economía neoliberal centralizadora del consumo en las ciudades del primer mundo produce una cultura individualista asociada como la que tenemos. Para realizar el cambio a un sistema económico que ataque la propiedad privada hemos de fomentar otro tipo de relaciones sociales de proximidad y apoyo mutuo, contrarias a la existencia de grandes ciudades y grandes estructuras políticas.
Para facilitar esta tarea, podemos basarnos en experiencias ya vividas por nuestro pueblo, debido a la manera en que nos hemos tenido que adaptar a un determinado medio y las relaciones sociales que creamos en el pasado. Ahora bien, estas relaciones se tienen que perfeccionar, ya que el ideal libertario va mucho más allá de conformarse con la reapropiación de los medios de producción. En este punto entraría fomentar una cultura libertaria para atacar muchos puntos más como el antipatriarcado, el ecologismo, la etica, etc.
Nuestras raíces culturales comunitarias existen, es un punto innegable. Han sido exterminadas de raiz como lo están siendo hoy en día (pese a la valerosa y impresionante resistencia) las culturas indígenas de la América Latina como la mapuche(respecto a la cual, por cierto, parece que no ha habido problema desde el anarquismo en asumir un planteamiento de reivindicación "nacional").
Para mi es importante partir de esta base para recuperar aspectos de nuestra relación social. Plantear que de estos planteamientos se puede pasar a un "peligroso nacionalismo" que se vaya a dedicar a hacer la guerra contra sus vecinos (imaginaos: guerra mundial entre Castilla y Andalucía

) me parece exagerarlo.
Adoptar una postura libertaria al respecto de esta problemática me parece necesario y coherente, y creo que coincidiría con muchas de las obras básicas del anarquismo clásico en este tema.