Un relato sobre el decrecimiento


Os juro que el futuro no será así

He recibido una consulta sobre cómo veo yo el futuro en estos tiempos convulsos, que nos conducen al decrecimiento, y si considero que el Comunismo Libertario es una alternativa viable, y me pide el interlocutor, que describa cómo trataría yo a los disidentes que apareciesen en un sistema económico de ese tipo, sin explotación ni tal ni cual. Y sin ningún problema, os explico mi opinión a través de una obra de teatro que he escrito ex profeso.

--------

Estamos en el año 2032. El Comunismo Libertario (en la versión decrecentista de 2022) ha triunfado a nivel mundial tras la Guerra de los Vegetarianos. Pérez, disidente de la comuna Amanecer Negro ha sido trasladado al islote del Perejil a pastorear cabras por su lengua excesivamente ligera y mordaz.

Acto Primero 
-PÉREZ [vestido de pastor; una cabra de plástico pre-revolucionaria está de pie, a su lado]
Heme aquí desdichado, en esta isla de mierda, por criticar a la secretaria de la Comuna por canija.  ¡Pero se acabó! Desde ahora sólo escribiré poesía bucólica. Ya está bien de peleas. ¡Si es que soy un chinche! ¡Si es que no estoy nunca tranquilo! La botella medio vacía y todo eso.  ¿Qué era una botella? ¿Se puede beber? ¿Eso sería lo importante? [Empieza a escribir]... Poesía melancólica, como mi estado de ánimo [declama con gran sentimiento]: llega el atardecer / y una vieja golondrina / se posa en el polvoriento tejado/ de la cabaña en ruinas. ¡Precioso! Lo mandaré a la comuna por paloma mensajera, a ver si me perdonan de una vez [la paloma vuela veloz]. Al cabo de un momento, de detrás de una roca, salen los campesinos Pavón y Mesa, que le narcotizan.

Acto Segundo 
[Pérez se despierta en una celda con mono azul de rayas blancas; en la pared, un esqueleto colgado de grilletes; frente a él están el Profesor Gorgojo, Pavón y Mesa, con el traje de campesino (boina negra, gafas negras de pasta sin cristales, pantalón negro, camisa negra y esparteñas)]

-PÉREZ ¿Qué hago aquí? [los mira confuso y esperanzado] ¿Estoy perdonado? 
-PAVÓN [agita un papel frente a sus ojos] ¿Qué tienes que decir en tu defensa?
 -PÉREZ [confuso]. ¿Qué? 
-MESA. Explica porqué la golondrina es vieja 
-PÉREZ [molesto]. ¿Qué? 
-PAVÓN ¿Y por qué la cabaña es ruinosa? 
-PÉREZ [irritado]. ¿Qué? 
-MESA. ¿No es mejor el amanecer que el atardecer? 
-PÉREZ [cabreado]. ¿Qué? 
-PAVÓN ¿Y esa alusión al polvo? ¿Qué insinúas?
-PÉREZ [indignado]. ¿Qué? 
- PROFESOR GORGOJO [didáctico]. Pérez, Pérez, nunca aprenderás. Tienes talento. ¿Por qué no escribes algo sobre nuestro joven sistema, sobre el Festival de la Recogida del Melón por ejemplo? Las mujeres robustas/ en sus delantales/ llevan el fruto/ a los bares…
-PÉREZ. [Estalla]. ¡Ese festival es una...! ¡Una...! ¡Agh! ¡Una gran oportunidad que me brindáis compañeros! 

Acto Tercero 
Pérez, rehabilitado, monta como Director Teatral una obra al gusto del Comunismo Libertario de Amanecer Negro, en el Pueblo De Al Lado. Esta obra la piensa Pérez para que la interpreten nada más que militantes libertarios, y el profesor o profesora de rango más elevado en el escalafón  del Sindicato de Universidades Anarquistas. Por eso carece de diálogos y sólo se farfullan ininteligibles gruñidos. El local teatral lo forman unas colinas y al fondo está el escenario. Sobre las rocas, en primera fila, están los miembros de los diversos Comités de Estudio para: plagas; calvicie; innovación para el decrecimiento… El público (unas dos mil personas llevadas en carromatos) se reparte incómodo entre las piedras. La gente se entretiene masticando granos de cebada crudos. Un gato maúlla hasta que alguien lo coge del rabo y lo lanza al infinito sin mayores ceremonias.
Se hace el silencio y comienza la función. La acción se desarrolla en una cueva prehistórica. Una hoguera. Antorchas. Un montón de garrotes y de huesos mondos y calaveras tirados por el suelo. Varios tíos guarrísimos peludos y en pelotas que se rascan y quitan los piojos. Uno de ellos observa a una paloma que ha entrado volando [sujeta por una cuerda con un palo que mueve un tramoyista]. De repente, el actor ruge y comienza a danzar alocadamente mientras lanza extraños gritos e intenta atrapar a la paloma por el pescuezo. Los gritos son del siguiente tipo: -Gruafff, Regruafff, orgle orgle orgle, ñañammm mmmmññññañammm, ourgl, ouuurgl, añ, arf, arf, arf, iaaaaa ioaie ioaaaa ioaie uggg... Cosas así. La escena continúa con iguales aspavientos y berridos durante quince minutos. Entonces, uno de los presentes que hasta ese momento estaba en silencio, coge una vara verde de olivo, y se dedica a pegar zurriagazos en el culo al perseguidor de la paloma. El de la paloma levanta los brazos dejando a la vista los sobacos, pilosos y olorosos. Cada vez que levanta los sobacos, sale una chica entre el público vestida con el traje de colectivista (falda negra, delantal negro, blusa negra, gorro puntiagudo y pañuelo negro hasta las cejas —símbolo de la sabiduría femenina—) y va distribuyendo entre las filas de espectadores trapos que están empapados de diversos aromas: pelo de cabra, erizo muerto, queso podrido, bacalao rancio... Los zurriagazos continúan hasta que la rama de olivo pierde su última hoja. Entonces entra en escena una persona que hasta ese momento estaba fuera del cuadro. Se trata de un anciano (representante del consejo de ancianos) que baila también desnudo con collar y brazaletes de manos y pies fabricados a base de latas de cerveza de la Era Industrial. El viejo lleva tatuado las siglas CNT encima de un caracol sobre la barriga, arranca la vara de olivo de la mano del azotador, y se fricciona con rápidos movimientos palante/atrás las ingles. Entonces estalla el frenesí, la paloma sigue suelta, revoloteando, y todos toman garrotes y la persiguen por la cueva sacudiéndose unos a otros de lo lindo. Para hacer partícipe al público de la obra, dos actores se mezclan entre el público sacudiendo la badana. Todo finaliza con la entrada de un león en el escenario. En realidad es un cerdo vestido de león. El que sujeta la paloma se sube al cerdo e intenta estrangularlo. El cerdo improvisa, se revuelve y lanza dentelladas y patadas. En el momento del clímax, el estrangulador le levanta el rabo al cerdo y lo sodomiza. El resto de los actores se coloca detrás del primer sodomizador, e inician un C.C.C. (coito culero colectivo). El profesor se sitúa de cara al público y se masturba de manera salvaje mientras se auto-penetra con una piedra alargada. Una figurante sube al escenario, y con una brocha de pintor asperge al público con excrementos licuados de de gallina. Entonces cae el telón, que lleva  pintada una gran A, una tortuga, un perezoso, las siglas de la FAI, el rostro de Durruti, la bandera del Consejo de Aragón y la palabra Amor. 
Los efectos sonoros y musicales se han conseguido golpeando con fuerza una lata de aceite de motor de la Era Industrial. Pérez sale a saludar al escenario, llama a los actores que forman filas, y reclama el aplauso del público asistente. 
Estalla un motín. Pavón y Mesa salen al escenario a poner orden, pero el cerdo les atropella. El gato lanzado al infinito regresa con ganas de revancha y clava sus garras en Pavón y luego en Mesa. Las antorchas caen y el escenario arde. 
Aplausos. 

Acto cuarto
- PÉREZ [Escena: trasladado al Peñón de Os Aguillóns, frente al Cabo de Ortegal, para recoger mejillón salvaje. Hay una tempestad acojonante. Efectos visuales y de sonido hechos con ramas de árboles secos. Los miembros de su compañía teatral se debaten entre las olas y arrecifes (arbustos) y le increpan] ¡Imbécil, mira a dónde nos has traído! [Pérez, con equipo de percebeiro, declama] ¡Brilla el sol espléndido! / Sobre nuestro joven sistema / Las jóvenes recogen melones / y no existe ni una pena! [Reflexiona] La verdad, no sé cómo se lo tomarán esos cabrones, porque se sobreentiende que ya no hay penas... / Y van a comerse la cabra / ... no... ¡Mierda!

Telón 
 

Aviso Legal  |  Política de Privacidad  |  Contacto  |  Licencias de Programas  |  Ayuda  |  Soporte Económico  |  Nodo50.org