Por potestad gubernativa
Pasó el referéndum, y llegó el acuerdo, dicen que más malo aún que el anterior. Tsipras afirma que lo aceptó porque la UE tenía preparada para Grecia, el infierno financiero, la ruina, la pera. Yo podría decir ahora que eso de la firma se veía venir. Pero, para nada. Yo no puedo adivinar qué es lo que va a hacer Tsipras, porque él, como presidente, tenía la potestad gubernativa de decir SÍ, o de decir NO.
La potestad del gobernante, es gobernar, tomar decisiones. Decía Burke (1) alguna vez en alguna parte, que una vez el elector deposita su papeleta, ahí acaba su responsabilidad, porque la traslada al gobernante. Y el gobernante no se debe a nadie más que a él mismo, y no debe de admitir que los electores condicionen su conciencia. Por sus conocimientos, relaciones, datos que maneja, dones…, el gobernante obtiene una visión de la situación privilegiada. El elector mira las cosas de forma mezquina, a ras del suelo, según su interés personal. El Gobernante observa desde la atalaya que le proporciona su posición relevante, para beneficio de la nación. Por lo tanto, quien gobierna ha de tomar decisiones con las que muchas veces los dominados no están de acuerdo. Pero son decisiones, que son legítimas, porque para eso le eligieron: para decidir. Más o menos, ese es el resumen de lo que piensan los demócratas burkianos.
Desde este punto de vista, la celebración del referéndum solo sirve para constatar, una vez más, el divorcio que existe entre lo que quiere la gente, y lo que firma el Gobierno. Tú le preguntas a un griego si desea firmar un acuerdo que le condena a él y a sus descendientes, y la respuesta indudable es que NO. Pero como a Tsipras lo que le estaban diciendo era, que o bien firmaba eso, o se encargarían de hundir a Grecia en el Océano Atlántico…, Pues Tsipras firmó. En definitiva, no solo podrían ahorrarse los referéndums, sino las mismas elecciones en los países endeudados.
¿Quién podría quitarle legitimidad al acuerdo? Nadie. El pueblo dijo, NO, el presidente dijo SI, y eso va a misa. Ahora bien, el presidente podría haber dicho NO, eso está claro, el pueblo SI, y Burke hubiera aplaudido al presidente, porque su potestad, es hacer lo que le dé la gana y firmar o no firmar el acuerdo.
Bueno, cosas que pasan, hay que decir que no es un acuerdo, ya que los acuerdos deben satisfacer a ambas partes, y aquí hay una que está que trina. También pasa que tras una firma de este tipo, mucha gente piensa que “no se podía haber hecho otra cosa”… Al fin y al cabo, la democracia es el arte de lograr que la gente vote en contra de sus propios intereses. Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno.
—————
NOTA
(1) Político irlandés del siglo anterior al antepasado o por ahí. No confundirlo con el burka.
- Inicie sesión o regístrese para comentar
- Imprimir
- 833 lecturas
- Enviar a un amigo