Bueno, me lo he leído sin subrayar, y me ha quedado esto.
De la parte en que critica a dry y adláteres, pues coincido en que el programa reformista no me gusta, lo mismo que a él. La reforma de la ley electoral, etc., me parecen reivindicaciones absurdas. Pero considerar que los que elaboran esas propuestas son descerebrados, es un error. Es subestimar a personas que elucubran dentro de los márgenes del sistema, y que establecen propuestas que son escuchadas y difundidas. No son tontos. Y un lenguaje tan excesivo me resulta cargante.
La segunda parte, en que hace la loa a la parte asamblearia del 15-M, pues también coincido en que es lo más bonito del asunto. Pero su entusiasmo por los royos colectivos, el rechazo que hace del individuo, que parece que tiene que disolverse un un nosotros… y el tema del rechazo al “hedonismo”, pues yo no lo comparto. Yo me he sentido más a gusto con cuatro punkis cuarentones bebiendo cerveza calentorra metida en bolsas de basura, que con esos chavales metidos de lleno en una especie de flipe colectivista de buen rollo. Cada cual tiene sus gustos.
Y tampoco coincido con su versión de que todo ha sido orquestado por poderosas fuerzas difíciles de definir, “desde arriba”, lo mismo que las revueltas de los árabes... Yo opino que los pueblos tienen sus propias agendas, y que se salen de madre con más facilidad de lo que se creen los analistas, que siempre buscan oscuras manos tejiendo enredos. Cuando muestra por ejemplo, la rapidez con que se montaron las acampadas y piensa que es una ingenuidad creer que eso puede ser espontáneo, yo he visto montarse acampadas de ese tipo en otras ocasiones, y no las ha organizado ninguna mano negra. Sucede que hay un interés común flotando en el ambiente y la gente va y salta. Y si mano negra hubo montando las acampadas, supongo que también la habría cuando la poli intentó disolverlas y acudieron decenas de miles de personas a apoyarlas.
El tema de la conspiranoia siempre me tira patrás.
Una manera inapropiada de situarse en la dura y difícil brega política es la del “Comunicado del Bloque Libertario y Autónomo. Por la extensión de las revueltas. Todo el poder a las Asambleas” (sin fecha, de finales de mayo de 2011), que nada dice sobre los contenidos políticos y programáticos del Movimiento, quedándose en la loa irreflexiva de sus formas organizativas y procedimientos de acción callejeros. Este “apoliticismo”, que resulta de un insensato culto al número y al movimiento, es un sinsentido cuando se está tratando de una cuestión política porque, en definitiva, los contenidos lo determinan todo. Y lleva a sus autores a ser simple mano de obra, cuando no carne de cañón, de quienes han hecho y hacen del 15-M una operación a colosal escala para actualizar y renovar las formas de dictadura del par Estado-capital, envejecidas después de más de 30 años de uso.
Total, que si no haces la crítica política, que seguro que los del BLA lo tendrían claro ya que sufrirían lo suyo, eres carne de cañón. Cuando al fin y al cabo, no queda otra que meterse en el charco y tomar posiciones. Porque vamos a ver, si todo ese embrollo no es más que una vasta operación de inteligencia superior, nosotros podríamos hacer exactamente lo mismo.
Las afirmaciones absolutas, tipo “el movimiento 15-M es fuertemente antifemisnista”, pues depende. Se juntan miles de personas, y salen a relucir los demonios sociales. Y el machismo es algo ampliamente extendido. En las asambleas y comisiones, a veces se soltaban discursos machistas-feministas, y a veces eran contestados habiendo una lucha de conceptos e ideas. Es un tanto optimista pensar que las cosas son como uno determina en su pequeño grupo, y que el racismo, el machismo y otros ismos pueden estar ausentes de lo que sea. Y es un tanto pesimista decir que “todo” es de determinada manera, cuando solo se ve una parte.
En fin, que el escrito de Félix, pues bueno, se resume (para mí) en que hay reformistas metiendo sus cuñas, que hay gente que quiere disfrutar de una vida mejor y que se han expresado en asambleas, y que en el año 1200 en Madrid sí que había democracia. En fin, que sin desmerecer su esfuerzo de análisis, que me voy a dormir.
PD matutina.
Ayer me mandó una amiga un libro de ATTAC, con especial recomendación a un artículo, que me rogó encarecidamente que leyese. De un académico mu renombrao, que explicaba claramente lo que nos estaba sucediendo a nivel mundial, y que se resumía en que todos los conceptos de la Ilustración estaban mal, que todas las predicciones habían fallado… Y que no había instrucciones sobre qué hacer. Cosa que yo sin ser académico podría haber dicho en el bar de la esquina. Porque vamos a ver, sale una cosa como la del 15-M, ¿Y qué se hace? ¿Se sigue estudiando, se mira de lejos o qué? ¿Qué hace un anarquista frente a los procesos sociales de nuestro tiempo? ¿Se pone a criticar, refiere que son reformistas, que nada vale? ¿Y qué? Está uno un poco jarto de análisis tremendos y de críticas al activismo. Menos mal que existen los activistas, que dan de qué hablar a los analistas.