Mensaje
por Ricardo Fuego » 13 Sep 2006, 16:47
Hay que ser muy estúpidx o tener muy mala leche para decir que esto es un debate entre internacionalistas y nacionalistas. Cómo se nota que aquí hay personas con mentalidad de hincha de futbol y que su intención no es llegar a la verdad, sino "ganarle" al "competidor". Con "revolucionarixs" como estxs, el capitalismo tiene para largo rato.
Lo que aquí se está debatiendo es el caracter del internacionalismo proletario y la posición de lxs revolucionarixs frente a la opresión nacional y la liberación nacional.
Hay dos posturas principales y enfrentadas.
1) La postura que dice que el internacionalismo proletario incluye el apoyo a las luchas de liberación nacional en los países oprimidos, contribuyendo a que esas luchas tengan un contenido de clase proletario.
2) La postura que niega la opresión nacional (o relativiza su importancia) y dice que apoyar la liberación nacional lleva indefectiblemente al nacionalismo burgués.
Creo que esta es una definición objetiva de las dos posturas enfrentadas.
Ahora, para seguir el debate hago una comparación obviamente parcial entre las dos. No tanto porque con esto espere cambiar la opinión de quienes sostienen la postura contraria (para eso hará falta una experiencia algo más profunda que un debate por internet), sino para clarificar cuales son las diferencias y por qué yo sostengo la postura que sostengo.
-La primera postura, que llamaré internacionalista, no se mantiene neutral ante la opresión de una nación por otra, es claramente antiimperialista y antiburguesa. De manera que esta postura combate activamente no sólo el nacionalismo burgués imperialista, sino el nacionalismo burgués antiimperialista. Esta postura demuestra que el destino de todo nacionalismo burgués es el imperialismo o la claudicación ante el imperialismo. Sólo el proletariado es capaz de un antiimperialismo revolucionario consecuente, integrando su lucha contra la opresión nacional en su lucha total contra la opresión total del Estado/Capital.
-La segunda postura, que llamaré antinacionalista, mantiene una posición neutral ante la opresión nacional, aunque diga que no. Por lo tanto, resulta en una quintacolumna del imperialismo y del antiimperialismo burgués. O sea, terminando reforzando el mismo nacionalismo burgués que dicen combatir, tanto en la nación opresora como en la nación oprimida. La segunda postura ve a la lucha de liberación nacional como un elemento extraño en la lucha por la autoemancipación proletaria, y de esta manera apoya a la reacción por partida doble. Por un lado, en la nación oprimida, favorece la apropiación de la dirección de la lucha por la liberación nacional por la burguesía o la pequeñoburguesía (dirección en el sentido de "adonde va", y no sólo en el sentido de "quien dirige"). Por otro lado, en la nación opresora, termina poniéndose en el mismo campo de la burguesía imperialista, siendo un obstáculo para la constitución del proletariado en sujeto político independiente.
-La primera postura considera a la lucha por la liberación nacional como una parte más de la lucha por la autoemancipación del proletariado.
-La segunda postura considera que la lucha por la liberación nacional es una "desviación" de la lucha por la autoemancipación del proletariado.
-La primera postura diferencia entre la nación como comunidad histórico-natural de un grupo de personas y la comunidad nacional falsa establecida por la dominación de clase de la burguesía, mediante su Estado, sus fuerzas armadas, sus símbolos patrios, su chovinismo, su imperialismo, etc.
-La segunda postura es incapaz de hacer esta diferencia, porque necesita probar que la nación es un invento de las clases dominantes. Es éste argumento el que cimenta todo el edificio ideológico que justifica en la práctica la neutralidad ante la opresión de una nación por otra y el internacionalismo abstracto.
-La primera postura considera que el internacionalismo proletario es la acción unificada inter-nacional de proletarixs de distintos países contra el enemigo común: el Estado/Capital.
-La segunda postura considera que el internacionalismo proletario es solamente el opuesto ideológico del nacionalismo burgués o una declaración de principios abstractos.
-La primera postura ve en el apoyo a las luchas de liberación nacional una oportunidad para practicar el internacionalismo proletario.
-La segunda postura ve en el apoyo a las luchas de liberación nacional una violación al internacionalismo proletario.
-Para la primera postura, lxs proletarixs que viven en países imperialistas tienen un deber revolucionario para con lxs proletarixs de las naciones oprimidas por su gobierno y sus fuerzas armadas. Deben apoyar la lucha de liberación nacional del proletariado del país oprimido, practicando de esta manera el internacionalismo y también aprovechando para atacar a "su" propia burguesía y Estado. O sea, que el apoyo a la lucha de liberación nacional del proletariado oprimido por su Estado también es una oportunidad para radicalizar la lucha por su propia autoemancipación.
-Para la segunda postura, lxs proletarixs que viven en países imperialistas no tienen ningún deber revolucionario para con lxs proletarixs de las naciones oprimidas por su gobierno. Es más, lxs proletarixs de los países imperialistas deben negar el derecho de lxs proletarixs de las naciones oprimidas a luchar por la liberación nacional. "Ustedes deben luchar en primer lugar contra su burguesía". Es más: "son ustedes lxs que deben apoyar nuestra lucha contra nuestra burguesía, son ustedes lxs que tienen que practicar el internacionalismo proletario en vez de su egoísta y burguesa liberación nacional".
Y por último la diferencia de método para analizar la realidad, que puede verse a través de todos estos mensajes:
-La primera postura se basa en un análisis materialista, concreto, holístico y dialéctico de la realidad. Para esta postura, las particularidades nacionales sí importan, las naciones sí existen, la lucha contra todo tipo de opresión NUNCA es una desviación. El terreno de esta postura es la práctica. Su motivación no es un esquema o una ideología, sino las ansias de libertad y la indignación profunda que siente un ser humano con capacidad de empatía ante la opresión y humillación sufrida por otrxs. Esta postura es genuinamente libertaria por su carácter solidario y fraternal.
-La segunda postura se basa en un análisis idealista, abstracto, reduccionista y mecánico de la realidad. Como ha determinado que las particularidades nacionales no importan, todo se reduce a la lucha de clases "pura" entre burguesía y proletariado. Lo que se aparte de esto es una desviación. El terreno de esta postura no es la práctica, sino las doctrinas y los principios. Ni bien empiezan a adentrarse con miras prácticas en el terreno histórico concreto, la contradicción entre la realidad y el esquema intelectual es tan profunda, que no tienen otra salida que mutilar y deformar la realidad de manera que entre en sus esquemas, y por lo tanto teniendo, en la práctica, un efecto transformador nulo o incluso negativo sobre la realidad. Su motivación no es emocional, sino puramente intelectual. Asumen la postura de profesores que tienen que andar enseñando a lxs demás por qué hay que luchar y por qué no. Incluso si tienen ideas libertarias, terminan asumiendo un comportamiento típicamente vanguardista, erigiéndose en especialistas que señalan cuál es el buen camino y cuál no.
Una vez más, para que de ahora en adelante quede bien claro que quien dice que esto es una discusión entre nacionalistas e internacionalistas es un idiota o un calumniador:
Lo que aquí se está debatiendo no es internacionalismo vs nacionalismo, sino el caracter del internacionalismo proletario y la posición de lxs revolucionarixs frente a la opresión nacional y la liberación nacional.