Un arma individual. Divulgando palabras.
Publicado: 19 May 2010, 11:53
VIRICA
Hace algunos años y con motivo de diversos altercados en cierto foro de historia universal entre aficionados y profesionales de esta materia, el “Círculo de Oz” decidió hacer una pequeña guía para su uso en los foros de Internet, por aquel entonces una novedad que, sin embargo, aun hoy, adolece de los mismos problemas.
En realidad, es una mera compilación de usos que abarcan desde la tradicional dialéctica a la simple educación y respeto pasando por la lógica informal o llano sentido común, pero que, aglutinadas en un texto, conforman un corpus sistemático. Si bien es cierto que en la práctica no evitó los enfrentamientos, a veces pueriles, si surtió efecto como mecanismo para detectar simples trolls o toca pelotas varios, además de facilitar la lectura de las intervenciones de aquellos que optaron por seguir sus consejos.
En fin, es una buena guía para propagar ideas en la red, un mecanismo poco valorado aun.
CONCRETANDO LOS TERMINOS.
No quise decir que fueras un hijo de puta.
Uno de los mayores logros del Ser Humano es su capacidad de comunicarse. Opinan los lingüistas que es una facultad esencial del cerebro, motivo por el cual, aun distantes entre si, todas las lenguas del planeta mantienen una estructura fundamental semejante. En cualquier caso, la lengua es un proceso simbólico y su contenido, el significado de las palabras, es convencional.
Para que un debate llegue a buen puerto deben de concretarse los términos del mismo. Cuanto más claro quede el objeto, más sencillo será ceñirse al contenido del susodicho. En el mismo sentido, es conveniente delimitar el significado de los términos que se utilizan y facilitar a todo el mundo el contenido de los mismos para evitar malos entendidos. Los debates por escrito deben de hacer especial hincapié en esta cuestión, dado que no existe la comunicación visual, siempre rodeada de tonos, gestos y demás atributos visibles que pueden variar o aclarar el contenido de la palabra.
EL QUE SABE, CONOCE EL PORQUÉ.
Así es, porque…
Hay una opinión por persona pero no nos llevemos a engaño, no todas merecen la misma atención. Para evitar susceptibilidades, el debate debe de encaminarse a los argumentos que sustentan dichas opiniones. En ese proceso se evidenciará la solidez o no de la opinión. Aquellas opiniones que no se cimientan en argumentos no merecen ser tenidas en cuenta y cualquier debate con un mínimo de rigor no debería atenderlas o se encaminará a escenas propias de los programas del corazón.
EL OBJETO DEL DEBATE, ESE GRAN OLVIDADO.
Soy doctor en historia, mi palabra es Ley.
Podríamos mirar para otro lado y afirmar que los debates procuran el enriquecimiento de los partícipes. El contraste de las informaciones y en fin, el aprendizaje. Ese sería un debate ideal. La realidad es que procuramos convencer a los demás de nuestros puntos de vista y en el peor de los casos, desdeñar los del contrario.
Un debate productivo, atendiendo al ideal y el real, debería encaminarse a incluir los puntos de vista del contrario en nuestro modelo mental. Procurando una síntesis de los puntos de vista. Ese sería un resultado adecuado, que también dista de la realidad pues el hecho es que hay grados de aceptación.
Nosotros debemos determinar el grado de aceptación de los puntos ajenos nuestro modelo, asumiendo que cuanto más férrea sea la impermeabilidad del modelo, más sencillo será caer en la mera confrontación y en fin, el cabreo y el insulto.
Esto no es excusa para dar cancha a locos, visionarios y demás iluminados con complejo de Galileo. Atiende a los argumentos.
BENDITA CONCRECION.
Adoro a Clarín.
Las personas no solo tienen escaso tiempo para dedicar al debate, sino que su capacidad de concentración es limitada. La claridad y la concreción en las exposiciones son la clave para una buena comunicación.
El debate no es un mecanismo de sustitución de la lectura de un libro. El debate se basa en la exposición de ideas. Las ideas son concretas y concisas. Una idea puede acompañarse de todo un relato de hechos y ejemplos que las apoyan, pero debe de quedar clara cual es la idea y cuales los ejemplos.
Una persona que capte la idea no necesitará de ejemplos con el consecuente ahorro de tiempo y esfuerzo, mientras que quién no capte la susodicha podrá ser derivada a esos apoyos para su facilitar su asimilación y comprensión de la idea principal.
No hay nada más nocivo para un debate que enunciados farragosos, largos, tediosos que invitan a no ser atendidos dejando pasar la idea principal entre una avalancha de barro insustancial, condenando el debate al fracaso.
Cuando al debate aportamos textos de otros autores, referencias, para apoyar una idea o argumento es conveniente señalar, resaltar las ideas principales de dicho texto que apoyan nuestra exposición, de lo contrario, caemos en el mismo problema que ante una exposición farragosa y densa. Que no se lea.
Recuerda el poder de comuniación de las imágenes. Una foto o un gráfico pueden ser más tajantes que cualquier parrafada.
LOS DIEZ MANDAMIENTOS DEL DEBATE VIRTUAL:
1. La realidad se filtra por nuestra subjetividad, no hay verdades absolutas. Lee lo que te cuentan.
2. Las victorias más duraderas son fruto del consenso. Atiende a lo que dicen los demás, todo tiene provecho.
3. Evita el corta-pega si no está más que justificado.
4. La gente debate contigo, no con el autor que te fundamenta. Deja clara tu idea fundamental.
5. Evita el debate con quién no argumenta sus opiniones.
6. Nunca insultes o menosprecies la opinión de otro.
7. No escribas bajo los efectos del calentamiento, el foro estará ahí dos horas después.
8. Respeta las normas del foro, nadie te obliga a permanecer en él.
9. Los foros no son un Chat. Si vas a escribir, aporta algo que tenga contenido.
10. Acabado un buen debate no hay perdedores ni ganadores, solo gente que sale con más información. Procura convencer con ella.
Estos diez mandamientos se concretan en dos:
Un usuario que no respete al menos la mitad de estos mandamientos, a buen seguro que es un troll y nunca olvides el humor, la vida es demasiado corta.
Salud.

