Salud compañeros:
Éste es mi primer post y no creo que me prodigue mucho más. No sé si está en el sitio correcto, así que agradezco a los moderadores lo ubiquen donde mejor les parezca. Quizá lea vuestras respuestas, pero -por mi propia seguridad- no contestaré. Mi cuenta de correo es una temporal de yopmail.com: cualquiera puede leerla y los mensajes se borran tras ocho días: muy útil para cosas como ésta.
Simplemente quiero poner en público mi experiencia de estos tres últimos años, desde el 5 de febrero de 2010, para que pueda ayudar a otros.
Vivo en España, pero ya no me considero ciudadano de este país. He sentido en carnes propias como políticos, jueces, abogados, fiscales y medios de comunicación - como decía Kipling - retuercen mi verdad para convertirla en lazos para tontos. He sido difamado, juzgado sin juicio, juzgado con juicio, maltratado, calumniado, agredido mental y físicamente, espiado, violado mi intimidad y mis comunicaciones y sujeto a vigilancia policial durante varios meses. Antes de que sigáis, os diré que no soy criminal ni asesino... pero el colectivo al que pertenezco - unos "privilegiados" -, osó plantar cara al estado para defender sus derechos.
Al grano, caso práctico: Como detectar cuando uno está sometido a vigilancia física policial.
Todo comenzó con una campaña de prensa en la que se nos acusó de ponernos enfermos. Lamentablemente, detrás de casi todas las ilegalidades cometidas en este país, hay un político detrás tomando la decisión.... y nunca se le caza como responsable.
La información que pongo a continuación proviene de la recopilación de datos que hicimos entre varias personas que fuimos sometidas a vigilancia. Trata de ser una explicación lo más detallada posible... pero no todos los datos corresponden a una única vigilancia, sino que es un compendio de todas ellas.
Una mañana como otra cualquiera, se presenta en mi casa un amable señor del "Club del libro" ¿? para entregarme un obsequio que viene en un sobre. Sabe donde vivo y conoce mi nombre completo.... Se empeña en que le enseñe mi DNI para identificarme y poder darme el regalo. Tonto de mi... accedo. Ahora ya estoy "marcado". Hay una persona que ha comprobado mi identidad y tiene mi cara. Sabemos que nuestra empresa pasó esos datos a la policía: Un compañero que había cambiado recientemente de domicilio y no lo había notificado a la empresa no recibió su "regalo".
El regalo viene en un sobre grande, barato, con un logotipo cutre impreso encima con impresora... nada de gastar en imprenta. Es totalmente "aséptico"... no incluye ningún dato de empresa identificable y el texto de la carta, sin direcciones, ni teléfonos de ningún tipo, es completamente anónimo: "Estimado Señor: Nos complace hacerle entrega de este regalo del club de libro. Atentamente," Sin firmas, ni membretes. Los regalos variaban: una carcasa de una película en DVD, sin DVD, un libro, un CD de música de grupos extraños.... es como si hubieran asaltado un videoclub quebrado y se hubieran llevado lo que no quería nadie.
A partir de que estás "marcado" comienza la vigilancia. La persona que te ha marcado lleva días vigilándote ya: sabe a que hora entras y sales, pues todos nuestros "marcados" se produjeron al poco de llegar a casa. Una vez te identifican, en ocasiones se quedan esperándote a que salgas de nuevo para informar a la siguiente persona que te va a seguir.
Aunque no lo parezca no es difícil saber si te siguen. Os pongo algunos datos más
- Todas las personas que nos siguieron llevan siempre un móvil en la mano, o algún objeto con el que puedan hacer algo. Si te das una vuelta brusca, automáticamente, ellos también se dan la vuelta y se ponen a hablar con el móvil, leer el libro etc.
- Si les miras a la cara fíjamente al darte la vuelta, se girarán bruscamente tratando de evitar que no les veas la cara, pero se consideran a si mismos "quemados" y no volverán a seguirte. Si tienen dudas sobre si les has podido identificar o no, pasados unos días, volverán a seguirte: No tienen tanto personal. Si la segunda vez que "quemas" a uno, le lanzas una sonrisita, dalo por fulminado y no volverá a darte la lata.
- Hacen cosas extrañas... pero hay que estar atento para detectarlas. Con nosotros, uno pidió factura en una panadería (¿pasaría la barra de pan al CNI como gasto?). Otro se tiro 10 minutos hablando por teléfono dentro de su coche, en pleno mes de agosto y sin bajar la ventanilla.
- Cuando van en coche, suelen ir casi siempre dos. Esto es importante, porque es raro ver a dos personas en un coche... somos así de gastizos y si no me creeis, fijaros. Llevan coches de gama media, Megane, Scenic, Laguna, Ford Focus y casi siempre tienen los cristales de la parte trasera tintados. Digamos que es para pasar desapercibidos.
- Las chicas que hacían la vigilancia son mucho más discretas y difíciles de cazar, pero se ponen más tensas cuando se las "quema".
- Cuando hablan por teléfono, lo hacen todo seguido: no tiene interlocutor al otro lado, así que no pueden pararse a escuchar las respuestas.
Y para acabar, algunos consejos
- Si crees que alguien te vigila, hazle una foto con el móvil. Si se enfada, cosa que haríamos todos, es que no te seguía. Si se da la vuelta o tarda mucho en reaccionar, es probable que os estuviera siguiendo.
- Cambia de dirección bruscamente al caminar por la carretera: da la vuelta o cruza de acera.
- Mira a los reflejos de los cristales de los escaparetes, de los coches etc.
- Entra en establecimientos que sepas que tienen varias salidas y sal por lugar distinto a donde entraste
- Busca sitios con gran concentración de gente.
- Si te crees vigilado, restringe tu vida social: no veas a tus amigos o ellos también quedarán "marcados"
- Habla con desconocidos por la calle: Pregúntales la hora, o por como se va a algún sitio. Es obvio que no los conoces... pero tu vigilante no lo sabe y esto generará más "ruido" en tu vigilancia.
- Saca una cámara de fotos por la ventana de tu casa y enfoca a la acera de enfrente de tu portal: Tú no puedes verlos, pero ellos a ti si.
- Cambia de hábitos: Sal a horas raras, camina sin destino fijo y vuelve. La terapia de los paseos a mi me sirvió para perder varios kilos
Siento el tocho y si todas estas cosas ya están dichas en otro sitio.
Ánimo con la lucha.