Pero es que hay discursos que me chocan tanto!! Y no me chocan de la manera en la que podría chocarme hace X años un panfleto "insu anti todo" (supongo que entenderéis lo que quiero decir...esto es el ghetto ), si no que incluso creo que ciertas actitudes no tienen cabida en un movimiento revolucionario.
Pongo el texto y en el siguiente post mi opinión, para que esté todo en orden y fácil de leer.
http://www.feministasacidas.com/2013/08/fenomeno-fa/
Puede ser que el fenómeno fan no os parezca una cuestión feminista, pero soy de la opinión de que todo lo que sea criticado por hombretones es importante para el feminismo, así que allá voy:
Las fans no son repudiadas por ser estúpidas o absurdas (que puede ser que lo sean, yo que sé), sino por ser mujeres y ocupar un espacio exclusivo. Si una de ella dice que Mozart y Beethoven son peores que Justin Bieber, el mundo entra en hecatombe: los insultos se suceden, lxs blogers se tiran a las pantallas a escribir, se hacen fotomontajes y el asunto se hace trending topic. Todo lo que hagan estas niñas tiene una repercusión exagerada ¿Por qué? Porque son mujeres solas. Leí a una articulista que decía que toda la vida había escuchado frases del tipo “Maradona es Dios” o “Messi es el Mesías” de tiarrones que se gastaban millonadas en entradas para un partido de fútbol, llegando a hacer noche en la cola para conseguirlas ¿Os suena? ¿Por qué esto no forma parte del mismo escarnio?
El fenómeno fan es de las pocas relaciones sociales admitidas que permiten la interacción de muchas mujeres solas, fuera de los hombres normativos (puesto que los niños, que pudieran llegar a formar parte, no cumplen los estereotipos de género). Que peligroso es esto para el patriarcado…¿no?
Ahora las más fans de todas son las Beliebers, y os prometo que si tuviera entre 12 años también sería una. Son mujeres muy polémicas y eso siempre me ha puesto cachonda. Es verdad que siguen a un machirulo esperpéntico, pero qué queréis que os diga?? El machismo nos lleva años de ventaja en cuestiones de marketing.
Yo de Justin Bieber no sé nada, soy más de los Back Street Boys. Me acuerdo de quedar con mis amigas, todas las tardes, detrás del colegio para repetir una y otra vez coreografías y canciones. De vez en cuando bajaban los chicos a tirarnos piedras, hoy entiendo que fruto de la rabia de encontrarse un espacio en el mundo del que no podían formar parte sin renunciar a sus privilegios. Pero a lo que quiero llegar es que todas esas tardes acababan es discusiones sobre cómo sería eso de follar, si nos dejaríamos besar por todos los Boys o si le chuparíamos el pene a Nick Carter; para documentar nuestro coloquio alguna vez tuvimos que besarnos para ver como era, claro, rigor ante todo. A los Back Street Boys les debo mi primer espacio no mixto en el que pude debatir/experimentar el sexo y la hermandad. Les debo mucho, creo.
Si las fans de los BSB hubiésemos tenido Twitter o la posibilidad de crear redes, la revolución feminista, a estas alturas, ya estaría resuelta. Esas mujeres son capaces de organizarse y cuidarse entre ellas, no se me ocurre mejor semilla revolucionaria. Tendremos que esperar y respetar sus tiempos mientras nos las imaginamos en sus cuartos teniendo sus primeros descubrimientos sexuales. Las beliebers de hoy serán las lesboterroristas del mañana.