J.0 Introducción

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Esta sección discute de qué se ocupan los anarquistas. No tiene mucho sentido pensar en el mundo a menos que también se pretenda mejorarlo. Y al tratar de cambiarlo, uno se cambia a sí mismo y a los demás, posibilitando una transformación radical. Por lo tanto los anarquistas dan su pleno apoyo a los intentos de los ciudadanos de mejorar sus vidas a través de acciones autónomas. Exhortamos a "la emancipación mediante la acción práctica" reconociendo que la "experiencia colectiva" ganada en "la lucha colectiva de los trabajadores contra los patrones" transformará el modo en que ven el mundo y el mundo mismo. [Bakunin, The Basic Bakunin, p. 103]. En última instancia "el verdadero hombre no es un objeto de deseo que residen en el futuro, sino que se encuentra, existente y real, en el presente." [Stirner, The Ego and Its Own, p. 327]

El anarquismo es más que sólo una crítica del estatismo y del capitalismo o una visión de una forma de vida libre y mejor. Es primero y más importante un movimiento, el movimiento de la clase trabajadora que intenta cambiar el mundo. Por lo tanto los tipos de actividad que discutimos en esta sección de las Preguntas Más Frecuentes forman el puente entre capitalismo y anarquismo. A través de la actividad autónoma y la acción directa, los ciudadanos pueden cambiarse a sí mismos y a su entorno. Desarrollan así, dentro de sí mismos, las cualidades mentales, éticas y espirituales que pueden volver una opción viable a una sociedad anarquista. Como argumenta Noam Chomsky:

"Sólo a través de sus propias luchas por la liberación la gente ordinaria comprenderá su verdadera naturaleza, suprimida y distorsionada dentro de estructuras institucionales diseñadas para asegurar la obediencia y subordinación. Sólo de este modo la gente desarrollará estándares éticos más humanos, 'un nuevo sentido del derecho', 'la conciencia de su fuerza e importancia como factor social en la vida de su tiempo' y su capacidad para realizar los anhelos de su 'naturaleza interior'. Tal compromiso directo en el trabajo de la reconstrucción social es un requisito previo para llegar a percibir esta 'naturaleza interior' y es la base indispensable sobre la cual puede florecer." ["preface", Rudolf Rocker, Anarcho-Syndicalism, p. iii]

En otras palabras, el anarquismo no es primariamente una visión de un mejor futuro, sino el movimiento social real que pelea dentro de la sociedad actual --injusta y carente de libertad-- por ese futuro mejor, y para transformar las cosas en el aquí y ahora. Nada cambiará sin levantarnos por nosotros mismos y por lo que creemos correcto. Por lo tanto la anarquía pueden encontrarse "donde sea que el pensamiento libre rompe con las cadenas del dogma; donde sea que el espíritu inquisitivo rechaza las viejas fórmulas, donde sea que la acción humana se imponga a través de acciones independientes; donde sea que el pueblo honesto, rebelándose contra toda disciplina forzada, se une libremente para educarse a sí mismo, y para reclamar, sin ningún maestro, su parte de la vida, y la completa satisfacción de sus necesidades." [Elisée Reclus, citado por John P. Clark y Camille Martin (ed.), Anarchy, Geography, Modernity, p. 62]

Para los anarquistas, el futuro ya está apareciendo en el presente y se expresa por la creatividad en las actividades de la clase trabajadora. La anarquía no es una utopía por-lograrse-algún-día, sino una realidad viviente que necesita deshacerse de toda restricción para crecer. La actividad anarquista como tal se ocupa del descubrimiento y el sostén de las tendencias emergentes de ayuda mutua que trabajen contra la dominación capitalista, por lo que los Anarquistas "estudian la sociedad y tratan de descubrir sus tendencias pasadas y presentes, sus crecientes necesidades, intelectuales y económicas, e idealmente se limita a señalar en qué dirección apunta la revolución" [Peter Kropotkin, Anarchism, p. 47]. De hecho, tal como discutimos en la sección I.2.3, las estructuras futuras de una sociedad libre son creadas en las luchas contra la opresión actual.

Los tipos de actividad delineadas en esta sección constituyen una perspectiva general del trabajo anarquista. De ninguna manera esta pespectiva resulta excluyente, estamos seguros de haber dejado afuera algunas cosas. Sin embargo, el aspecto crucial de la verdadera actividad anarquista es la acción directa, la actividad autónoma, la auto-ayuda, la auto-liberación y la solidaridad (“Deseamos” --como escribió el sindicalista francés Fernand Pelloutier-- "que la emancipación del pueblo sea tarea del mismo pueblo." [citado por Jeremy Jennings, Syndicalism in France, p. 18]). Tales actividades pueden ser hechas por individuos (por ejemplo el trabajo de propaganda), pero usualmente los anarquistas enfatizan la actividad colectiva. Esto es porque la mayoría de nuestros problemas son de una naturaleza social, lo cual significa que su solución sólo puede ser trabajada colectivamente. Las soluciones individuales a los problemas colectivos están condenadas al fracaso, en el mejor de los casos retardando aquello a lo que se oponen (lo más obvio es el consumismo ético, como se discute en la sección E.5). Además, la acción colectiva nos acostumbra a trabajar en conjunto, promoviendo la experiencia de la autogestión y la construcción de organizaciones que nos permitirán administrar activamente nuestros propios asuntos. También, y nos gustaría enfatizar esto, puede ser divertido encontrarse con otras personas y trabajar con ellas, puede resultar satisfactorio y empoderador (potenciador/fortalecedor).

Los anarquistas no reclaman ante aquellos en el poder para que lo abandonen. No, promovemos formas de actividad y organización mediante las cuales todos los oprimidos puedan liberarse a sí mismos con sus propias manos. En otras palabras, no pensamos que aquellos que están en el poder van a renunciar por altruismo a ese poder o a sus privilegios. En cambio, los oprimidos deben recuperar el poder mediante sus propias acciones. Debemos auto-liberarnos, nadie puede hacerlo por nosotros.

Vamos a discutir las ideas anarquistas en lucha, lo que verdaderamente hacen (y, casi tan importante, lo que no hacen) aquí y ahora y el tipo de alternativas que los anarquistas tratan de construir dentro del estatismo y el capitalismo para destruirlos. La actividad anarquista es tanto una lucha contra la opresión como una lucha por la libertad. Así como se trata de una pelea contra la pobreza material, los anarquistas combaten la pobreza espiritual. Al resistir las jerarquías enfatizamos la importancia de vivir, y de la vida como un arte. Al proclamar "Ni Patrones ni Esclavos" instamos a una transformación ética, una transformación que ayude a crear la posibilidad de una sociedad verdaderamente libre. Este punto fue acentuado por Emma Goldman luego de ver la derrota de la Revolución Rusa por una combinación de política leninista y de intervención capitalista armada:

"la revolución es en vano a menos que esté inspirada por sus ideales últimos. Los métodos revolucionarios deben estar sintonizados con los objetivos revolucionarios... En resumen, los valores éticos que serán establecidos por la revolución deben ser iniciados con las actividades revolucionarias... Estas últimas sólo pueden servir como un puente real y confiable para una vida mejor si se construyen del mismo material que el de la vida a alcanzar." [Red Emma Speaks, p. 404]

En otras palabras, la actividad anarquista es más que la creación de alternativas libertarias y la resistencia a las jerarquías, se trata de construir el nuevo mundo sobre la cáscara del viejo, no sólo en lo que respecta a las organizaciones y la actividad autónoma, sino también dentro del individuo. Es acerca de auto-transformarse al transformar al mundo (obviamente ambos procesos interactúan y se apoyan mutuamente) por lo que "nos asociamos con otros para trabajar por... la revolución social, que para nosotros significa la destrucción de todo monopolio y todo gobierno, y la apropiación directa por los trabajadores de los medios de producción", no olvidamos que "el primer objetivo del Anarquismo es asegurar y favorecer la dignidad individual del ser humano" [Charlotte Wilson, Anarchist Essays, p. 43 and p. 51]

A través de la acción directa, la autogestión y la actividad autónoma convertimos en una realidad viviente las palabras oídas por primera vez en Paris, en 1968: "¡La imaginación al poder!". Estamos seguros de que son palabras con las cuales las generaciones previas de anarquistas hubiesen acordado de todo corazón. Hay un poder en los humanos, un poder creativo, un poder para trocar lo que es en lo que debe ser. Los anarquistas intentan crear alternativas que permitirán que ese poder sea expresado, el poder de la imaginación.

Tal movimiento social cambiará el modo en que actuamos como individuos, los anarquistas buscan aplicar sus principios tanto en la vida cotidiana como en sus luchas diarias. Esto significa que los libertarios debemos cambiar el modo en que nos relacionamos con nuestros camaradas y compañeros de trabajo, de manera tal de aplicar de modo ubicuo los ideales igualitarios. Parte de esta tarea es desafiar las jerarquías sociales en todos los lugares, incluyendo el hogar. Como lo expuso Durruti:

"¿Cuándo dejarán de pensar como los burgueses, que las mujeres son esclavas de los hombres? Es suficiente con que la sociedad esté dividida en clases. ¡No vamos a fabricar aún más clases creando diferencias entre hombres y mujeres en nuestras propias casas!" [citado por Abel Paz, Durruti in the Spanish Revolution, p. 341]

De modo que tenemos un proceso interactivo de lucha y transformación de ambos, la sociedad y los individuos dentro de ella. En la sección que sigue discutiremos las formas de actividad autónoma y la auto-organización. Los anarquistas piensan que las mismas estimulan y desarrollan la imaginación de aquellos oprimidos por las jerarquías, poniendo en acción la anarquía y ayudando a crear una sociedad libre.